La obra social de las casi desaparecidas cajas de ahorro, ahora desarrollada principalmente por las fundaciones bancarias, deja cada año una huella considerable. La de «La Caixa» gestiona, por ejemplo, la red de museos CaixaForum y la Fundación Unicaja custodia la mayor colección de manuscritos machadianos del mundo. Sin embargo, durante la última década su labor ha perdido brillo. Si hace diez años unos 141 millones de personas disfrutaron de las más de 200.000 actividades que se realizaron, en 2018 la cifra cayó un 75%: la obra social solo alcanzó a 35 millones de personas. Tras estas cifras se esconde un deterioro de los recursos: la inversión se ha reducido un 60% en 10 años.

813 millones de euros, 120.000 actividades

El pasado año el gasto de la obra social fue de 813 millones de euros que sirvieron para llevar a cabo 120.000 actividades, según la CECA. En total, 35 millones de personas fueron alcanzadas por dichas acciones, de las cuales la mitad fueron personas de colectivos específicos, como niños y jóvenes, mayores de 65 años o emprendedores. Precisamente, el 53% de la inversión total se dedicó a ellos.

Concretamente, en 2018 se destinaron más de 210 millones de euros a los menores de 25 años que alcanzaron a más de 9,6 millones de jóvenes, más de 148 millones de euros a personas en riesgo de exclusión (tres millones de beneficiarios), casi 50 millones a mayores de 65 años (2,6 millones de personas alcanzadas), más de 22 millones de euros a personas con necesidades especiales (1,7 millones de beneficiarios) y ocho millones de euros para más de 600.000 emprendedores.

Por áreas, el 43% de la inversión se destinó a acción social, el 22% nutrió las áreas de educación e investigación, el 21% se dedicó a actividades culturales y de patrimonio, el 8% a desarrollo local y creación de empleo y el 6% restante se distribuyó a partes iguales entre las áreas de medio ambiente y la de deporte y ocio. Desarrollo local y creación de empleo fue la que más recursos dedicó por beneficiario, con una media de 55,67 euros por persona. Por el contrario, «cultura y patrimonio vuelve a ser el área más eficiente, al conseguir un mayor número de beneficiarios (15.677.863) por cada euro invertido (10,90 euros)», detalla el informe anual de la CECA.

beneficiarios obra social

La crisis de la obra social

La crisis no solo se llevó por delante la mayoría de las cajas de ahorro (actualmente solo quedan dos), sino que hizo mella en los recursos destinados a su obra social. En 2018 la inversión de las cajas y de las fundaciones bancarias, encargadas de gestionar la obra social de las antiguas cajas, fue de 813 millones de euros. En 2008, la cifra ascendía a 2.058 millones. En una década el gasto se ha reducido un 60%.

Los peores años fueron de 2009 a 2013 cuando la inversión se redujo a un ritmo medio del 20% interanual, Pasamos de una inversión en 2008 de más de dos mil millones de euros a tan solo 647 invertidos en 2013. Tal y como ha venido señalando la CECA es sus informes anuales, el deterioro de los recursos de la obra social se debió al entorno económico en el que estaba sumido el país.

A partir de 2014 y hasta ahora los recursos se han ido incrementado año tras año, aunque a un ritmo muy inferior al que lo hacían antes de la crisis y muy lejos de compensar el empobrecimiento que sufrió durante los peores años. En 2018 el crecimiento fue del 1,56% y la media interanual entre 2014 y 2018, del 4,72%. “El año 2018 vuelve a reflejar un crecimiento de la inversión en Obra Social por quinto año consecutivo, lo que refleja la estabilidad de las entidades del sector y su consolidación, en línea con la mejora de la economía”, detalla la CECA en su memoria sobre la actividad de la obra social del pasado año.

Proyectos destacados de 2018 de la obra social

A continuación, algunas de las actuaciones más destacadas de la obra social del sector financiero español:

  • Afundación Abanca: la obra social de la entidad gallega llevó a cabo 84 exposiciones en las que participaron más de un millón de personas, «situándose como líderes en Galicia en promoción y divulgación cultural». Destaca la exposición Dalí y el surrealismo en la Colección Abanca que pudo visitarse en el Museo Thyssen de Madrid.

 

  • Fundación Bancaja: la programación cultural de Bancaja «la ha hecho consolidarse como el centro cultural en Valencia con más visitantes en 2018» con exposiciones sobre Picasso o Sorolla.

 

  • Fundación Ibercaja: la obra social ha desarrollado el proyecto Mobility City que apuesta por impulsar la automoción y la movilidad sostenible en Zaragoza.

 

  • Fundazioa Kutxa: la fundación otorgó ayudas a 198 proyectos impulsados por asociaciones guipuzcoanas que desarrollan proyectos sociales y culturales.

 

  • Obra social «La Caixa»: ha contado con 520 millones de euros que ha destinado a acción social, investigación, educación y cultura. Ha llevado a cabo 50.000 iniciativas que han alcanzado a más de 14 millones de personas. Entre los principales ejes que han orientado la labor de la obra social se encuentra la lucha contra la pobreza infantil y la creación de empleo. En el ámbito cultural, gestiona ocho museos CaixaForum, así como el centro CosmoCaixa (museo de ciencia sito en Barcelona).

 

  • Fundación Unicaja: el pasado año la fundación adquirió una vasta colección de manuscritos de los hermanos Machado. Desde entonces, custodia el mayor fondo catalogado de textos de los hermanos en todo el mundo. Una muestra fue expuesta en Sevilla.