Los depósitos europeos son tan seguros como los españoles: mismo límite FGD y supervisión del BCE. En cambio, las Letras del Tesoro o los fondos monetarios no cuentan con FGD y su rentabilidad puede variar.
Además, muchos de estos depósitos se pueden contratar desde España a través de plataformas como Raisin, que actúa como intermediario seguro y gratuito. Todo el proceso se hace online, y puedes comparar opciones de diferentes bancos con total transparencia.