Cómo vender una parte de la casa tras una separación
La forma más fácil y rápida de vender un piso tras un divorcio o una separación es llegar a un acuerdo con la ex pareja. Si esto no es posible, debemos actuar por la vía judicial o acudir a una empresa que compre proindivisos. En función del tipo de unión de la pareja, será más adecuado un camino u otro.
Así, si la situación previa a la ruptura era de pareja de hecho o de matrimonio con separación de bienes, cualquiera de los dos caminos es válido: acudir a un juez o vender nuestra parte de la casa a un proindiviso.
Por el contrario, si estábamos ante un matrimonio en régimen de gananciales, debemos acudir por la vía judicial para disolver el régimen económico matrimonial y dividir los bienes. Si uno de los dos sigue sin querer vender, el juez hará la división de la cosa común y se venderá en subasta pública.