Shakira y Piqué venden su casa: ¿por qué les costará tanto como a ti?

No sabemos si fue la ‘Monotonía’ o la hasta ahora desconocida habilidad de Piqué para la actuación. Pero, salvando algunas diferencias, la historia de infidelidad y el divorcio de Shakira y Gerard podría ser también un capítulo de mi vida o de la tuya. Que sí, que en algo nos parecemos a las estrellas, aunque no sea en los millones que tienen en el banco o en los problemas con Hacienda. 

La última noticia en esta historia de corazones rotos y nuevos hits para bailar hasta el cansancio es que la pareja ha decidido vender su vivienda familiar. Esa es, probablemente, la decisión más acertada en caso de divorcio y esto aplica tanto a su mansión como a tu casa, cualquiera sea su precio. Y podemos asegurarte que los desafíos a los que se enfrentarán a partir de ahora son los mismos a los que te enfrentarás tú queriendo vender tu propiedad. Investiguemos un poco más. 

¿Cuánto vale la casa de Shakira y Piqué?

Cuando se vende una casa, el dilema siempre es el mismo: ¿cuánto vale realmente? Primero se habló de que la mansión de la pareja, ubicada en Ciudad Diagonal (Esplugues de Llobregat), valía unos quince millones de euros. Ahora, en el programa de Telecinco ‘Socialité’ afirmaron que el valor es de ‘solo’ diez millones, lo que parece que será el precio de salida. 

¿Encontrarán un comprador dispuesto a pagar esta cantidad o tendrán que rebajarla? Eso está por verse y depende, entre otras cosas, de la estrategia de venta que haya diseñado su asesor inmobiliario. Pero si seguimos lo que ocurre generalmente en el mercado español, lo más probable es que tengan que bajar el precio entre un 5% y un 10% antes de firmar la compraventa, más aún si tienen prisa por cerrar este capítulo cuanto antes. 

¿Quién comprará la mansión?

Empresarios, políticos, deportistas y extranjeros. Así son las personas que buscan viviendas en Ciudad Diagonal y, entre este grupo, podría estar también el comprador de la mansión. Aunque a primera vista podríamos pensar que cualquiera moriría por vivir en la casa de una reina de la música y una estrella del fútbol, este inmueble es mucho más difícil de vender de lo que crees. ¿Por qué?

Para empezar, su precio acota el volumen de compradores que pueden interesarse en la propiedad: vender una casa de lujo siempre es más difícil que vender una vivienda de condiciones estándar. Además, la mansión tiene algunas características muy concretas. La más importante es que se trata de tres propiedades compartidas, donde hasta ahora vivían Shakira y Piqué con sus hijos y los padres de ambos. También tiene un estudio de música, una bodega y varias piscinas.

Basándonos en el precio del inmueble, nos animamos a anticipar (con riesgo de equivocarnos) que quien se quedará con la mansión será un comprador extranjero, ya que, en general, no hay tantas personas con un nivel adquisitivo tan alto en Barcelona. No obstante, tendría que tratarse de alguien que busca dónde vivir y no invertir para alquilar: la rentabilidad de una operación de este tipo suele ser baja, además de que es igualmente difícil encontrar un inquilino.

Llegar a un acuerdo para vender la vivienda es siempre la mejor opción

Por suerte, Shakira y Piqué se han entendido en este punto y acordaron vender la mansión a un tercero. Pero ¿qué pasaría si las diferencias entre ambos hubieran sido irreconciliables? Sabemos que Shakira quiere irse a Miami cuanto antes, así que supongamos que Piqué no hubiera querido transmitir la propiedad. En ese caso, hubieran existido tres alternativas para vender la vivienda familiar pese a la negativa de la expareja: 

• Que Piqué comprara la mitad de la vivienda a Shakira para continuar viviendo allí sus días felices con Clara Chía.
  
• Que vendiera su parte de la vivienda a un tercero, como una empresa, quien pasaría a compartir la titularidad del inmueble con Shakira.
  
• Que Shakira demandara a Piqué para obligarlo a vender la mansión. Esto terminaría con una venta en subasta pública.

¿Por qué ninguna de estas tres opciones les convenía? La dos y la tres implican vender la vivienda por un precio mucho más bajo que su valor de mercado. Si la casa vale diez millones de euros, Piqué podría obtener unos tres millones por vender su mitad de la propiedad a una empresa. Si la venta fuera a subasta pública, la casa en su totalidad se vendería por unos 7 millones. 

Visto lo visto, ninguna alternativa es muy rentable. Pero ¿por qué no se quedó Piqué con la vivienda? Según parece, porque la propiedad es demasiado grande. Además, no creo que fuera fácil seguir viviendo en la misma propiedad que solía compartir con su ahora expareja.