Cómo desgravar la hipoteca: requisitos y deducción
¿Contrataste tu hipoteca antes de enero de 2013? ¡Estás de suerte! Puedes aplicarte la deducción por adquisición de vivienda habitual en tu declaración de la renta del ejercicio de 2024. En esta página te explicamos los requisitos para desgravar por tu hipoteca y cuánto dinero puedes ahorrarte en IRPF.
Requisitos: ¿quién puede desgravar la hipoteca?
Técnicamente, la deducción por adquisición de vivienda habitual se suprimió en 2013, pero aún la puedes aplicar si se dan ciertas circunstancias establecidas por la Agencia Tributaria. Veamos cuáles son los requisitos que debes cumplir para beneficiarte de la desgravación de la hipoteca:
La vivienda hipotecada debe ser tu residencia habitual según la definición de la Agencia Tributaria: que haya sido tu residencia durante al menos tres años seguidos y que la hayas habitado de forma efectiva y con carácter permanente durante 12 meses desde que la compraste.
La vivienda tienes que haberla comprado antes del 1 de enero de 2013. En las comunidades autónomas de régimen común (todas menos Navarra y el País Vasco), esta deducción no se puede aplicar sobre compras efectuadas a partir de esa fecha.
La deducción tienes que haberla aplicado anteriormente. Para desgravar por la hipoteca es necesario haber practicado la deducción por adquisición de vivienda habitual en el ejercicio de 2012 o en cualquiera de los anteriores. Se hace una excepción si no presentaste la declaración de 2012 o anteriores porque no llegabas al mínimo o si tus rentas no generaron una cuota suficiente para aplicar la desgravación.
Esta deducción también la puedes aplicar si pediste una hipoteca para construir, ampliar o rehabilitar tu vivienda habitual antes del 1 de enero de 2013.
En estas dos regiones se aplica un régimen tributario distinto al de las otras comunidades autónomas. En Navarra, puedes desgravar por tu hipoteca si compraste tu vivienda habitual antes del 1 de enero de 2018. Y en el País Vasco, podrás practicar esta deducción sin importar cuándo adquiriste tu casa o piso.
¿Cuánto dinero desgrava una hipoteca?
Con la deducción por adquisición de vivienda habitual puedes desgravar hasta un 15% de lo pagado por la hipoteca durante el año, sobre una base máxima de 9.040 euros anuales. Es decir, que podrás ahorrarte un máximo de 1.356 euros en IRPF cada año. Ahora bien, si la hipoteca tiene dos titulares y hacéis la declaración por separado, la base máxima se dobla: 18.080 euros, lo que se corresponde con un ahorro máximo de 2.712 euros.
Esta deducción la puedes conseguir al sumar dos tramos:
El estatal, por el que te puedes desgravar hasta el 7,5% de lo que abones al año por tu préstamo hipotecario.
El autonómico, por el que puedes desgravarte lo que establezca tu comunidad autónoma, con un máximo del 7,5%. Puede ser mayor en algunas regiones si tienes menores a cargo, eres familia numerosa o tienes alguna discapacidad.
Por ejemplo, pongamos que has pagado unas cuotas mensuales de 500 euros por tu hipoteca durante el último año, que son 6.000 euros en total. Si puedes practicar una deducción por adquisición de vivienda habitual del 15%, en la declaración de la renta de ese ejercicio te podrás desgravar 900 euros (el 15% de 6.000).
En Navarra, la deducción puede ser de hasta el 15% sobre un máximo de 7.000 euros. En el País Vasco, puede ser de hasta el 18%, con un ahorro máximo de 1.955 euros en Vizcaya, de 1.530 euros en Guipúzcoa y de 2.300 euros en Álava.
¿Qué gastos se pueden desgravar con la hipoteca?
Como decíamos, puedes aplicar esta desgravación sobre todo lo que pagues por la hipoteca año a año. Pero ¿qué gastos se incluyen dentro de esa cifra? Te lo contamos a continuación:
Las cuotas: las mensualidades de la hipoteca que pagas durante el año.
Las comisiones: las que te cobre el banco el año en que hagas la declaración de la Renta.
La vinculación: el precio de los seguros o de la cuenta asociada a la hipoteca, por ejemplo.
Los pagos adelantados: las amortizaciones anticipadas se suman al total anual que puedes deducirte.
Gastos de refinanciación: los asociados a una novación o una subrogación, por ejemplo.
Gastos de cancelación: los generados por cancelar registralmente tu hipoteca al terminar de pagarla.
Tendrás que sumar los gastos de este tipo que pagues durante el año y aplicar la desgravación sobre la cantidad total. Recuerda, eso sí, que si todos estos gastos suman más de 9.040 euros, la deducción la podrás practicar únicamente sobre un límite máximo de 9.040 euros.
Truco de HelpMyCash: si queda poco para que acabe el año y has conseguido ahorrar un dinero, puedes usarlo para amortizar anticipadamente una parte de tu hipoteca y llegar así hasta la base máxima de 9.040 euros. De este modo, podrás sacar el máximo partido a la desgravación.
Más dudas resueltas sobre la deducción de la hipoteca
Los gastos para aplicarte la desgravación por la hipoteca los tienes que incluir en las 547 y 548 del apartado "Deducción por inversión en vivienda habitual", que encontrarás en el Anexo A.1.
Sí, todavía puedes desgravar por la hipoteca tras una refinanciación, sea cuál sea la operación que uses para cambiar sus condiciones: una novación, una subrogación de acreedor o la contratación de una nueva hipoteca para cancelar la actual. La Agencia Tributaria considera que el préstamo modificado sigue siendo el que contrataste para comprar tu casa, lo que aún te da derecho a practicar la deducción por compra de vivienda habitual.
Ahora bien, si amplías el capital de tu hipoteca, solo podrás aplicar la deducción sobre lo que pagues para devolver el importe “original” del préstamo. Supongamos, por ejemplo, que tienes una hipoteca pendiente de 100.000 euros y que la amplías hasta los 150.000 euros. La desgravación solo la podrás practicar sobre lo que pagues para devolver los 100.000 euros iniciales, es decir, sobre dos tercios de lo que pagues al año.
No, no puedes desgravar por los impuestos por la compra de una vivienda: el IVA si es nueva (más el IAJD) y el ITP si es de segunda mano.