El testamento recoge la voluntad de una persona sobre cómo han de repartirse sus bienes, incluidas las cuentas bancarias, cuando falte. Sin embargo a pesar de ser uno de los documentos notariales más solicitados, sigue siendo un gran desconocido para una gran parte de la sociedad.
El testamento es el mejor mecanismo para garantizar que se cumplan las decisiones sobre el futuro de los bienes de cualquier persona.
Fallece un familiar, cómo gestionar sus cuentas
¿Cómo hacer un testamento?
Hacer testamento es sencillo, solo se necesita el DNI y explicar al notario como se desea repartir el patrimonio, a quiénes se dejan los bienes y como han de ser repartidos. Independientemente de lo que valgan los bienes del testador, o del saldo que se tenga en la cuenta corriente, hacer un testamento suele oscilar entre los 38 y los 50 euros. Solo en casos excepcionales la cantidad puede ser mayor.
El testamento es revocable y se puede cambiar tantas veces como se quiera, de modo que el realizarlo con posterioridad deja sin efectos el anterior. Después del fallecimiento será cuando los herederos tendrán que hacer un inventario de los bienes (inmuebles, cuentas bancarias) y de las deudas, si las hubiera, y proceder a su reparto.
¿Qué pasa si no se hace testamento?
Es otra de las dudas más frecuentes, ¿qué ocurre con la herencia si no existe testamento? Pues bien debemos saber que no hay ningún problema pues la propia Legislación Civil determina los herederos a quienes corresponde la herencia siguiendo un orden de parentesco, tanto si el fallecido estuviera casado y con hijos como si el difunto no tuviera descendencia, eso si estos deben acudir al notario a hacer una “declaración de herederos abintestato”.
Cuentas bancarias, ¿qué hacer con ellas cuando fallece un familiar?
Esta es una de las dudas más frecuentes tras la muerte de un ser querido. No solo debemos enfrentarnos al duelo, sino encontrar el rumbo que debemos tomar para iniciar la tramitación de la sucesión. Si el difunto tenía todo “en orden” y contaba con un testamento el procedimiento es sencillo pero si no sabíamos que cuentas bancarias tenía… la situación se complica. Para saber cómo gestionar las cuentas cuando un titular fallece debemos realizar una serie de procesos:
- Obtener el certificado de defunción
- Obtener el certificado de actos de última voluntad
- Liquidar los impuestos vinculados a la herencia
¿Se puede renunciar a una herencia?
Heredar en ocasiones significa incrementar sustancialmente nuestras finanzas, pero cuando en vez de heredar bienes heredamos deudas, la cosa cambia. Tener información sobre cómo actuar si nuestro legado está lleno de números rojos nos puede ahorrar sustos, tiempo y dinero. Para renunciar a una herencia es necesario formalizarla en escritura pública.
Ante una herencia con más deudas que bienes, también podemos aceptarla a beneficio de inventario, esto es, aceptarla pero pagar únicamente las deudas que puedan saldarse con los bienes heredados.
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Autor: Irene Merlo
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