Esto es lo que perderás en poder adquisitivo en 5 años en depósitos al 0%

Antes de la crisis financiera, los depósitos bancarios eran un producto muy popular debido a sus altas rentabilidades, que rondaban el 5%. Ahora, aunque su rentabilidad media sea del 0,04%, siguen siendo un producto recurrente para el ahorrador conservador. Sin embargo, según los últimos datos del BdE, los hogares españoles depositan su dinero en depósitos a la vista (cuentas bancarias) por encima de los depósitos a plazo, productos que tampoco están ofreciendo una buena rentabilidad (0,03%). ¿Cuánto estamos perdiendo si dejamos nuestro dinero en uno de estos productos con intereses cercanos al 0% durante cinco años? Lo calculamos a continuación:

¿Cuál será el valor de 50.000€ en 5 años?

El IPC (Índice de Precios al Consumo), también conocido como inflación, mide la evolución del precio de los bienes y servicios que consume la población española. Seguramente, notamos al comprar una barra de pan, un café o los abonos para el transporte que cada año los precios suben, por lo que el valor de nuestro dinero disminuye año tras año.

Supongamos que dejamos 50.000 euros en una cuenta o un depósito que remunera el 0% (lo que ofrecen los bancos actualmente) durante cinco años. Si nos basamos en una tasa de inflación del 2%, lo que el BCE marca como ideal, nuestro dinero valdría un 2% menos cada año:

Pasados los cinco años, nuestro poder adquisitivo se ha visto reducido en casi 5.000 euros, lo que equivale a una rentabilidad de aproximadamente el -10%.

¿Cómo combatir la inflación sin arriesgar nuestros ahorros?

Llegar a combatirla al 100% es imposible si nos decantamos por productos de ahorro sin riesgo, puesto que no existen actualmente alternativas que superen el 1,54% TAE en el mercado. Sin embargo, existen opciones que nos van a permitir mitigar los efectos de la inflación. A continuación, mostramos una tabla con los depósitos bancarios a 5 años que dan más por nuestro dinero ahora mismo:

Contratando cualquiera de los productos detallados anteriormente, estaríamos mejorando la rentabilidad negativa que provoca la inflación sobre nuestros ahorros. Por ejemplo, escogiendo el primer producto, al término del plazo, nuestro poder adquisitivo habría disminuido en 4.804 euros y gracias a la elección del producto, hubiéramos conseguido 3.550 euros de beneficios, por lo que solo perderíamos 1.254 euros en poder adquisitivo pasados los 5 años (-2,5%).