La escalada arancelaria ha venido acompañada de una creciente volatilidad en los mercados financieros. La bolsa norteamericana sufrió pérdidas importantes, de las que se ha ido recuperando a medida que la postura del presidente Donald Trump se relajaba. Mientras tanto, la Reserva Federal ha decidido mantener los tipos de interés en su nivel actual.

En Europa, la apreciación del euro, la caída del precio del petróleo y la debilidad de la demanda sugieren un escenario de desinflación. En su última reunión, el Banco Central Europeo (BCE) redujo aún más sus tipos de interés, situando la facilidad de depósitos en el 2,25% y los expertos esperan que siga a la baja en los próximos trimestres y afectará al euríbor.

Euríbor a menos del 2% en todo el 2026… ¿y hasta el 2027?

Según las previsiones del euríbor (referencia clave para muchas hipotecas variables) elaboradas por Funcas, este índice experimentará una caída progresiva en los próximos meses. En el primer trimestre de 2025, el euríbor cerró en el 2,15%, pero los bancos que pertenecen a Funcas esperan que caiga por debajo de la barrera psicológica del 2% ya en el tercer trimestre de 2025: 1,96%.

A partir de ahí seguiría descendiendo hasta cerrar en el 1,85% a finales de 2026. Esta tendencia a la baja puede ofrecer un alivio a quienes tienen hipotecas variables y están sujetos a las fluctuaciones de este índice.

El tipo de interés de los depósitos del BCE, que también influye en las hipotecas, experimentará una reducción aún más pronunciada. Se espera que baje al 2,09% en el segundo trimestre y por debajo del 2% en el tercero. A partir de ahí continuaría con una senda a la baja hasta cerrar en el 1,78% a finales de 2026.

Hipotecas variables, las beneficiadas de la caída del euríbor

Las hipotecas variables están directamente relacionadas con el euríbor. Si el euríbor se mantiene por debajo del 2% en los próximos años, este tipo de hipotecas podría resultar interesante para aquellos futuros hipotecados que apuesten por que el euríbor no aumentará a corto plazo.

Una de las principales ventajas de las hipotecas variables es la posibilidad de ver una reducción en las cuotas mensuales si el euríbor continúa descendiendo. Esto es especialmente atractivo para quienes buscan una hipoteca flexible y dispuestos a aprovechar la bajada de los tipos de interés. Además, si el euríbor se mantiene bajo durante un largo período, las hipotecas variables podrían resultar más económicas que las fijas a largo plazo, debido a la menor tasa de interés.

Sin embargo, las hipotecas variables también conllevan riesgos importantes. Uno de los principales es la incertidumbre respecto a las futuras subidas del euríbor. Si las previsiones no se cumplen y el euríbor aumenta inesperadamente, las cuotas mensuales podrían subir de forma considerable (como pasó en 2022 y 2023), lo que afectaría la planificación financiera a largo plazo.

Si crees que una hipoteca variable es para ti, te presentamos las mejores a continuación: las más atractivas tienen un diferencial sobre el índice de apenas un 0,49% y si optas por un bróker hipotecario, puede situarse en el 0,30% más euríbor. Y si crees que no te convienen por su mayor riesgo, puedes consultar cuáles son las condiciones de las mejores hipotecas fijas.

Para beneficiarte de la caída del euríbor

Las mejores hipotecas variables