Cada vez más personas buscan no solo un hogar cómodo, sino también eficiente y respetuoso con el entorno. En ese camino, Banca March ha dado un paso adelante con su nueva hipoteca verde, una fórmula que combina condiciones financieras ventajosas con el compromiso medioambiental.

La entidad ofrece esta hipoteca dentro de su gama Avantio.  En concreto, la Hipoteca Mixta Avantio parte de un tipo fijo durante 10 años del 2,25% TIN para aplicar un diferencial sobre el euríbor del 0,60% (2,82% TAE). Pero lo más interesante es su incentivo verde: si la vivienda obtiene una puntuación de sostenibilidad igual o superior a 5 puntos, el cliente se beneficia de un descuento adicional de hasta 30 puntos básicos en el tipo fijo y en el variable.

Un informe que analiza más de 100 variables

En la práctica, la bonificación se aplica de forma progresiva según la calificación del inmueble en el Informe de Vivienda Sostenible, una evaluación detallada que Banca March realiza sin coste durante la tasación.

Clasificación de la vivienda Puntuación mínima Descuento adicional

No sostenible

Aceptable

Bien

Muy bien

Menos de 5 puntos

Desde 5 puntos

Desde 7 puntos

Desde 9 puntos

0%

-0,10%

-0,20%

-0,30%

El informe analiza más de 100 indicadores para medir la sostenibilidad global de la vivienda, y no se limita al certificado energético. Evalúa elementos de aislamiento y consumo, pero también factores como la contaminación del entorno, la proximidad a zonas verdes, el acceso al transporte público, la accesibilidad, o el confort acústico. Incluso tiene en cuenta la gestión de la comunidad de propietarios, valorando la calidad de las instalaciones comunes y los servicios del edificio.

¿Qué son las hipotecas verdes y qué requisitos deben cumplir?

Las hipotecas verdes son préstamos hipotecarios diseñados para financiar viviendas sostenibles o fomentar la rehabilitación energética de inmuebles existentes. Su principal diferencia respecto a una hipoteca convencional está en que ofrecen mejores condiciones, como un tipo de interés más bajo o bonificaciones, a cambio de que la vivienda cumpla ciertos criterios de eficiencia.

Para que una hipoteca se considere verde, el inmueble debe contar:

  • con una calificación energética alta (A o B)
  • con una mejora acreditada en su eficiencia, por ejemplo, tras una reforma que reduzca el consumo energético

En todos los casos, el objetivo es el mismo: reducir las emisiones, ahorrar energía y favorecer la inversión en viviendas más sostenibles. Además, al mejorar el comportamiento energético del inmueble, el cliente también reduce sus gastos a largo plazo, tanto en calefacción y electricidad como en mantenimiento.