Iberdrola quiere protegernos, ¿son interesantes sus planes?

Rebajar las facturas de luz puede ser muy complicado si no prestamos atención a lo que contratamos. Además de que los precios entre las distintas tarifas es muy dispar, cada comercializadora tiene sus propias condiciones. Por ejemplo, existen planes que exigen la contratación de algún servicio adicional. ¿Son interesantes estos suplementos? ¿Qué nos proponen las eléctricas? Hoy revisamos algunas de los servicios adicionales que tiene Iberdrola para proteger nuestra vivienda.

Seguridad eléctrica del hogar

De entre los productos de asistencia y mantenimiento que ofrece Iberdrola a sus clientes, el de Protección Eléctrica Hogar es el más completo. Con él nos cubrirán las averías y el mantenimiento integral de nuestra instalación eléctrica, así como de los electrodomésticos de gama blanca (lavadora, nevera…). Es decir, si existe la necesidad de reparar un electrodoméstico o hacer algún tipo de bricolaje de la instalación eléctrica, nos lo cubre.

Adicionalmente, este servicio extra de Iberdrola nos incluye lo que califican de «intervención anual» de un técnico cualificado. En definitiva, que un operario de la compañía, o autorizado por la misma, ponga en funcionamiento algunos aparatos, sustituya las lámparas o sustituya los enchufes e interruptores, entre otros. Eso sí, en este apartado debemos tener claro que no está todo incluido. En concreto, solo podremos evitarnos los gastos de desplazamientos del técnico y hasta tres horas de mano de obra. Es decir, no se incluyen los materiales o la actualización de la instalación eléctrica.

Este servicio cuesta 5,95 euros mensuales (más IVA) y no exige compromiso de permanencia. Además, si lo contratamos ahora, disfrutaremos de dos meses gratis.

Iberdrola se preocupa por nuestros electrodomésticos

Un plan más económico es el de Protección Electrodomésticos, con el que nos cubren en caso de averías en los principales aparatos por 1,95 euros/mes (más IVA). Si el coste es más interesante es porque, obviamente, en este caso el servicio es mucho más escueto. Entre las características del producto que debemos conocer el más importante es que, cuando la comercializadora habla de «electrodomésticos», lo reduce a la lavadora y el frigorífico, por lo que no hay mucho margen de asistencia. Eso sí, tal y como se indica en las condiciones del servicio, Iberdrola cubre el desplazamiento, la mano de obra y las piezas necesarias para llevar a cabo la reparación (además de los impuestos). Es decir, no deberíamos tener un gasto adicional en caso de tener que utilizar el seguro.

Ahora bien, ¿cuáles son los «contra»? En primer lugar, debemos saber que existe un periodo de carencia de 30 días desde la activación del servicio. Pero no es al única condición que deberemos respetar. El segundo punto va relacionado al «cuándo» nos atenderán, ya que, salvo fuerza mayor, la atención se realizará de lunes a viernes en un máximo de dos días laborables. Por último, existe un límite de 300 euros anuales en reparaciones. Es más, en caso de que el aparato esté dentro del periodo de garantía no se harán cargo; igual que si tiene más de 10 años de antigüedad. En definitiva, muchas limitaciones.

El aire acondicionado a punto

El último plan que nos propone la eléctrica se llama Protección Climatización y está enfocado a las instalaciones de aire acondicionado. Pero ¿qué nos cubre realmente? Tal y como se recoge en la ficha del servicio, Iberdrola nos arreglará las averías de nuestros equipos de climatización, así como la propia instalación. Para ello, se nos incluye el coste de desplazamiento, la mano de obra y las piezas (además del IVA), con un máximo de 300 euros anuales. Además, nos ofrecen seis meses de garantía sobre las reparaciones realizadas, todo por 1,95 euros/mes (más IVA).

Tras ver las limitaciones de los otros seguros, ¿qué «esconde» este? Al igual que sucedía con el de los electrodomésticos, aquí también se excluyen los aparatos que tengan garantía o con más de 10 años de antigüedad. Pero lo más llamativo de este servicio es que está planteado para segundas residencias, lo que resulta bastante excluyente.

En conclusión, existen muchos servicios adicionales en las comercializadoras de luz. No obstante, siempre hay que mirar qué cubren realmente, ya que las limitaciones suelen ser bastante grandes.